Pendiente¿?

Hoy alcanzo el cuarto de siglo, según me dicen y me digo yo mismo a partir de aquí todo empieza a ir cuesta abajo.

Como en otras fechas señaladas, rememoramos lo vivido y en ocasiones ansiamos lo que nunca vivimos.

Hoy, en este recuerdo de lo que he vivido, de lo que he hecho (y he dejado de hacer) he recordado este pequeño espacio, que fue mi gran ventana al mundo y poco a poco se fue convirtiendo (por dejadez) en un pequeño agujero que pocas veces se abría.

Leyendo alguno de los antiguos posts y de los antiguos comentarios, de aquellos que alguna vez entrasteis en este pequeño agujero, solo se me ocurre decir...GRACIAS, gracias por compartir diferentes experiencias, más agradables o más tristes, pero experiencias que al fin y al cabo nos hacen ser seres más completos en nuestra esencia incompleta.

El cuarto de siglo es el punto álgido de una cima que va cuesta abajo, a partir de hoy veré como es esa pendiente!

Esperanza

Nunca debemos perder la esperanza...

La esperanza es lo que nos hace seguir luchando, luchando por un mañana mejor, aún cuando quien crees que va a luchar por ese mañana mejor, se convierte en aquello contra lo que has luchado siempre.

La esperanza es aquello que te hace seguir teniendo fé en aquellas personas por las cuales has dado todo lo posible, y que en algún momento te han fallado, te han llamado asesino, ladrón, mentiroso, desgraciado...y tú lo has guardado en tu memoria, lo has cargado en tu espalda y aún así sigues luchando por ello...y por ellos.

La esperanza es poder olvidar todo aquello que pasó, dejarlo de lado, olvidar las malas cosas y relativizarlas. Pensar que un futuro mejor está por llegar, y que todos nosotros haremos nuestro propio propósito de enmienda, cambiaremos, variearemos, evolucionaremos...y todo será de otra forma, de una mejor forma.

La esperanza es ese ente intangible, invisible, por el cual nos levantamos cada mañana...para que sea mucho mejor...

PARA HACER UN MAÑANA MEJOR....

....ESPERANZA....

Y me contabas historias

Y me contabas historias...

Historias que de vez en cuando me podían parecer más interesantes, más justas, más razonables...

De vez en cuando la vida suele ser un cúmulo de circumstancias, historias y experiencias vividas con cierta gente. Experiencias y peripecias compartidas, que al final te crean una trayectoria común y lo que es más extraño, más intrigante...un destino común.
Cuando pasa el tiempo, en esta aventura que es la vida, empiezan a aparecer nuevos actores y debemos acostumbrarnos a su implicación, a su intervención estelar en nuestra serie televisiva particular.
En ocasiones no podemos acostumbrarnos a que, ELLOS, más jóvenes; más nuevos; menos experimentados se acerquen a nuestras dinámicas, a nuestros desafios de futuro. Pero debemos entender que ELLOS estarán ahí para marcar nuestro futuro.
Todos intentamos que nuestra historia se convierta en algo particular, en algo especial, en algo que tenga cierto misticismo donde solo queremos que entre quien nosotros deseamos, pero finalmente nuestra historia se convierte en un mundo donde tod@s deberían tener la oportunidad de entrar.

Y me contabas historias...

Dejemos que alguien más participe.

Agujeros

De vez en cuando, cuando todo parece negro...empiezas a pensar, recuerdas algo, a alguna persona y sólo se te ocurre ir hacia aquel lugar donde estaba.
A veces el lugar donde estaba se ha quedado vacio y ya no hay nada.
Otras veces, gente que pensabas que rellenaba ese gran agujero negro, te falla tanto que piensas que sería mejor quedarse atrapado en ese inmenso bucle.
El tiempo pasa, la vida transcurre en una cierta monotonía demasiado aburrida e insulsa, la gente de alrededor cambia.
Esa gente cambia, algunos quedan, pero aunque no cambien por fuera, por dentro cada vez los reconoces menos.
A quien cambia demasiado para ya no ser capaz de reconocerlo mejor decirle ADIOS.
El gran problema es cuando nosotros mismos cambiamos tanto que ya no nos reconocemos.
tal vez tengamos que decirnos adios a nosotros mismos¿?

Tiempos pasados

Las cosas malas...o buenas...suelen pasar de año en año, un cumpleaños, un aniversario de boda...
Hace más de un año que no escribía en este blog, muchas cosas han pasado.
Todo lo que ha pasado se podía resumir en una palabra: VIDA.
Pero qué es la vida.
La vida puede ser algo extraño que te acompaña en el paso del tiempo. En el paso de mi tiempo, han pasado muchas cosas: decepciones varias de gente a la que quería, frustación, nervios convertidos en malas contestaciones, pero también buenas cosas; volver a comprobar (algo que ya se sabía) que la gente que realmente te quiere siempre estará a tú lado, llegar a abrazar lo que más querías, seguir peleando por aquello en lo que creias...
Todo lo que pasa no volverá. Lo podremos recordar pero no será lo mismo, ya no estaremos igual de enfadados, o igual de tristes, es la suerte que tienen quienes quieren hacernos daño.
Es la grandeza de recordar, lo que queremos recordar

Cosas de Ismael...o mias

Hoy no pretendía escribir en el blog (ni mucho menos a estas horas!!!).

El trascurso de nuestros días, oscila entre la rutina y las sorpresas inmediatas. Hoy, después de una reunión ( de esas rutinarias) me he encontrado con una vieja amiga (a la que tal vez, después de tanto tiempo, llamarla amiga, tal vez sea demasiado exagerado) y la rutina de la noche ha cambiado.

Después de pasar un rato (de un martes noche) recordando viejas historias y hablando de cosas intrascendentes, pero agradables. Me he marchado para ese sitio, que cada vez es menos mio, pero cada vez me recuerda más a mi.

En el local, en vez de dormir, me he puesto a recordar, con música de Ismael Serrano de fondo, con la música de una parte de mi vida.

La vida avanza, pero todo se queda, las canciones grabadas del señor Serrano y las vivencias vividas con estas.

En el fondo la vida son recuerdos, recuerdos que alegran o hacen llorar, pero en el fondo recuerdos que nos llenan a todos.


PD: Este post se lo dedico a #la princesa tontita# que gracias a su post he vuelto a escribir en este post, que aunque longevo, anda algo olvidado.

Ventanas

Todos nosotros cuando estamos en algún lugar, miramos el mundo desde la óptica de una ventana.

Hoy, ahora mismo, me encuentro mirando por la misma ventana, que hace unos cuatro años miraba por primera vez. Una ventana que me abría un cielo, unas nubes, unas ideas, que tal vez ahora sean las mismas que entonces.

Esas nubes que siguen paseando por la bóveda celeste que tenemos como cielo, tal vez ya no sean las mismas, pero aquellos pensamientos que me trajeron, no estoy seguro de que sean tan diferentes.

Mirando a ese cielo, algo oscurecido por el trascurso del tiempo (de ese obligado horario que la sociedad racional nos obliga a obedecer) y de las horas, me vuelvo a situar en los pensamientos e ideas que tenía cuando era más joven, inexperto, y tal vez, más feliz.

Si las nubes no cambian, si el tiempo sigue siendo el mismo (aunque más viejo), porqué nosotros cambiamos tanto.